Finalmente, después de pedir consejo a
un orientador decidí hacer bachillerato. Ahora quedaba el dilema de
si ir a estudiar al San Juan o al Sidón, obviamente decidí ir al
San Juan, ya que decían que tenía mas nivel que el Sidón, aunque
no mejores instalaciones.
Una vez allí todo era diferente, la
gente curioseaba para ver quien eran los nuevos que venían de
Paterna. Tenía la sensación de haberme mudado a otro pueblo.
En varios días nos fuimos haciendo amigos de los alumnos del San Juan. Los profesores bromeaban metiéndose con la gente de Paterna, diciendo que somos brutos, catetos, etc; por supuesto que lo hacían de buena fe y para reírnos un poco entre nosotros.
Ya en el primer mes de clase empecé a
gustar a algunas chicas del instituto, desde aquel entonces he tenido
varias novias, con las que he aprendido muchas cosas y con las que me
he llevado algo bueno y malo, a veces. Actualmente tengo novia formal
y llevamos juntos ya un tiempo.
Tan pronto como nos hicimos amigos de
los de Medina empezamos a salir allí algunos fines de
semana, salíamos de fiesta y empezábamos a conocernos mejor y a
quedar mas veces. Varios de mis amigos tenían un grupo de música,
así que me empecé a interesar por la música, empecé tocando la
guitarra, pensé que la música era un mundo por descubrir, más
tarde me comenzó a gustar el bajo y eso es lo que toco actualmente.
He
tenido montones de experiencias, buenas y malas, que pasaran a formar
parte de mi vida y de mi personalidad. Me ha encantado formar parte de ese instituto y lo recordare siempre con cariño.
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